El Conde de Almaviva vive con su Condesa en una mansión cerca de Sevilla. El Conde se ha encaprichado con Susana, la sirvienta de su esposa, que está a punto de casarse con Fígaro, el sirviente del conde. Fígaro se horroriza al enterarse de que el conde planea seducir a Susana la noche de la boda. Mientras tanto, Cherubino, el joven paje del Conde, se ha prendado de la Condesa, pero lo han despedido tras descubrirlo con Barbarina, la hija del jardinero Antonio.

Fígaro decide impedir que el Conde seduzca a su futura esposa y para ello solicita la ayuda de la Condesa, Susana y Cherubino, que se disfraza de mujer. Esto da lugar a una serie de equívocos, malentendidos y planes frustrados en los que participan todos los habitantes de la mansión mientras cada uno intenta conseguir lo que quiere (y a quien quiere).